REVISTA DE INGENIERIA DYNA

Este convoy circulará durante unos 100 km de forma automática para ensayar la efectividad de comunicación del nuevo sistema de señales con los medios de control del tren. La automatización de líneas de metro o de trenes ligeros, especialmente en recorridos aislados de posibles interferencias, es ya un hecho, pero aun se piensa que para los ferrocarriles convencionales de líneas más o menos abiertas aun deberán pasar bastantes años para que sean una realidad.

El sistema empleado, Automatic Train Operation (ATO), es similar al utilizado por ALSTOM en sus construcciones automatizadas habituales, como en los suburbanos con doble piso de París. En el caso de Holanda, un conductor viajará de forma permanente en la cabina para supervisar la operación, probando también el eventual paso de automático a manual en algunos momentos.

Se asegura que la marcha automatizada podrá conseguir una optimización del consumo de energía, una marcha más uniforme y la posibilidad de mayor densidad de circulación, lo que aumentaría la capacidad de la línea.

De todas maneras, la aplicación de un sistema automatizado a redes antiguas de ferrocarril no parece que sería una tarea sencilla ni de aplicación a medio plazo.