REVISTA DE INGENIERIA DYNA

Palabras clave:

[No Consta]

Tipo de artículo:

TRANSCRIPCION

Sección:

VARIOS

En la era de la información y del conocimiento no hay espacio para los secretos ni siquiera el del sueldo. De nuevo, la empresa tiene que convertir un peligro latente en una oportunidad. ¿Cómo? Diseñando un sistema de retribución transparente y coherente, que contemple los tres planos que motivan a las personas: el material, el profesional y el de los valores. Los códigos de buen gobierno apuntan cada vez más hacia la transparencia de las políticas salariales y proponen la creación de Comités de retribución y promoción que comunique las retribuciones de la alta dirección y de los consejeros. De nuevo se trata de conseguir que un peligro latente, como es el ocultismo total de muchas empresas, se convierta en una oportunidad. ¿Cómo? A través del diseño de un sistema de retribución con criterios profesionales guiado por una lógica interna que fortalezca el vínculo de dentificación entre la empresa y sus empleados. Quizá convendría recordar que la comunicación del sistema de retribución es la herramienta más eficaz para trasladar las claves del funcionamiento de la empresa y los valores en que se apoya. Hoy la empresa necesita más que nunca a personas que añadan valor, que aporten su “talento” y su ilusión en pos de una mejora continua. El sistema de retribución debe facilitar que se generalice una actitud de superación profesional, de creatividad permanente y de espíritu de innovación y riesgo, que son las características necesarias para cualquier aventura empresarial. La retribución debe ayudar y estar al servicio de la estrategia de negocio, de los objetivos y de la cultura que se pretenda implanta, y para eso es necesario contar con un diseño y unas políticas claras y conocidas por todos.