Buscador :
Volver al Menú
| : /
Vote:
Resultados:
10 Votos
AGOSTO 1971 - Volumen: 46 - Páginas: 325-333
Descargar pdf
Cuando en los tiempos más remotos el hombre logró dominar el fuego, seguramente contempló la llama con veneración y debió sentir un legítimo orgullo. Pero no sospechó que, por sí mismo y en ejercicio de su voluntad, atentaba por primera vez contra la integridad de su medio ambiente. Se trata, pues, de un hecho cuya existencia se remonta a mucho tiempo , antes de que se hablase de la contaminación del aire como consecuencia de las diversas actividades humanas. Con el desarrollo de la industria y su concentración en determinadas regiones, la contaminación, favorecida por condiciones meteorológicas excepcionales, pudo alcanzar niveles muy elevados. Ello significó, para la mayoría, una revelación: se apercibió de que la tasa de mortalidad había crecido de forma inquietante en las regiones aludidas. De hecho, no eran estas las primeras víctimas. Es posible imaginar que desde la edad del fuego, algunos de nuestros antepasados pudieron asfixiarse en sus cavernas debido a emanaciones de las combustiones. Sabemos, con certidumbre, por los relatos de Plinio el Joven, que Plinio el Viejo murió en el año 79 asfixiado por los vapores del Vesubio en la catástrofe que destruyó Pompeya. Podemos creer que todas las víctimas del fuego griego no murieron solamente debido a las quemaduras, sino también debido a la asfixia. Actualmente, la cuestión que más preocupa es la contaminación del aire en las grandes aglomeraciones urbanas e industriales, aquella en la que está sumida casi continuamente más de la mitad de la población de los países industrializados y bajo la que vive. Ante un problema de tal importancia, hay que adoptar una actitud realista. La civilización industrial existe y es definitiva. Es un hecho que ha modificado totalmente nuestro medio ambiente y nuestra vida y a quien debemos, a todos los niveles, inmensos progresos, que, sin dicha civilización, serían inimaginables. Sin embargo, las cuestiones relacionadas con el medio ambiente han adquirido en la actualidad máxima importancia para la humanidad, porque condicionan la vida de las personas más que nunca y, también, porque constituyen un factor determinante para unas condiciones de vida aceptables en el futuro. Actualmente se está prestando atención a los problemas de la contaminación en todos los países técnicamente desarrollados y, en muchos de ellos, se están tomando medidas para reducir y, si es posible, eliminar dicha contaminación, mediante una legislación y una reglamentación destinadas a evitar la repetición de accidentes agudos.
Compártenos:
© Revista de Ingeniería Dyna 2006 - Publicaciones Dyna, S.L & Co-Publisher UK Zhende Publishing Limited
Órgano Oficial de Ciencia y Tecnología de la Federación de Asociaciones de Ingenieros Industriales
Dirección: Unit 1804 South Bank Tower, 55 Upper Ground, London UK, SE1 9EY
Email: dyna@revistadyna.com
Regístrese en un paso con su email y podrá personalizar sus preferencias mediante su perfil
Nombre: *
Apellido 1: *
Apellido 2:
Email: *